La televisión es un sistema para la transmisión y recepción de imágenes y sonido. El concepto en sí da la clave: imágenes. Es lo que vemos al encenderla y nada más hacerlo sabemos si tenemos que cambiar de canal, si nos gusta (o no), si hay que subir el volumen, bajarlo o directamente pulsar el botón de off.
Gracias a la televisión y a la asociación de ideas, se han podido crear marcas perfectamente identificables para cada cadena. Este es el claro ejemplo de Telecinco del grupo Mediaset.
Hoy en día el color azul, clarito principalmente, lo asociamos directamente a Telecinco, el rojo a Cuatro, el verde a la Sexta y así con todas las cadenas que actualmente tienen una imagen consolidad. Y esto que de primeras puede parecer que no es importante, sí lo es y mucho. Ahora la cuestión, ¿cómo y por qué han conseguido hacer esto?
Básicamente todo se reduce al trabajo durante muchos años de meter constantemente en la mente del espectador el color azul y el logo de la cadena tanto en sus contenidos, como en sus plataformas o publicidad. A partir de 2009 la imagen corporativa de Telecinco cambió y seleccionaron este color.
Por ejemplo, en programas como Got Talent, GH o Supervivientes, vemos cómo el color azul está presente en su estética general.
En la página web de la cadena también predomina este color al igual que en todas sus redes sociales.
También es necesario este trabajo por parte de la productora, Mediaset, con todos los logos de las cadenas en conjunto. Han conseguido que funcionen a la perfección y en armonía. Todos tienen la misma forma geométrica y cada uno se adapta al color de cada contenido. El espectador identifica en décimas de segundo el grupo al que pertenecen los logos.
Por ejemplo, Divinity, al ofrecer contenidos para un target más femenino utiliza el color rosa que se asocia a la belleza o por otro lado, Boing, con el azul más clarito para los niños, asociado a la inocencia.
Telecinco es líder de audiencia como de costumbre y como hemos visto anteriormente el color azul se asocia con liderazgo, pero también con credibilidad, verdad y poder. La cadena a través de este color puede pretender dar una imagen aunque luego no sea la verdadera. El liderazgo lo tiene, eso está más que claro, pero la credibilidad... con programas en los que todo está guionizado, en los que se sabe que simplemente se hacen las cosas por puro morbo.
Aún así, este es otro de los puntos a favor que tiene la utilización del color. Inconscientemente en la cabeza del espectador se generará una imagen apoyada en todos los elementos visuales. Cuanto más la cuiden las cadenas, más podrán esconder la realidad.
Es crucial para todas las cadenas de televisión tener un color y forma asociados, que con una simple mirada el espectador sepa qué está viendo. Tiene que ser reconocible en cualquier lugar. A partir de ahí ya sólo queda trabajar en que los contenidos sean de calidad y atrapar audiencias.
El cambio radical en estos últimos años de los logotipos de las cadenas ha ayudado a consolidar en cierta medida la imagen de cada una de ellas por lo que nunca hay que dejar de lado este aspecto tan importante.
María Sánchez González 26 / 03 / 2019